ISABEL SÁNCHEZ “LA
INQUISIDORA” Y SU PAPEL EN LA VILLA DE CHILLÓN
En
este pequeño trabajo nos centraremos en conocer cuál fue el papel que jugó la
Santa Inquisición en la villa de Chillón, así como descubrir algunos de
aquellos vecinos que cayeron en manos del tribunal y tuvieron que hacer frente
a sus condenas y juicios. Pero sobre todo en conocer a una de las grandes
mujeres que ha dado la historia de Chillón como es; Isabel Sánchez “La Inquisidora”.
El
tribunal de la Santa Inquisición se creó en la Corona de Castilla de la mano de
los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón en el año de 1478
en la ciudad de Sevilla, por medio de la bula del papa Sixto IV “Exigit sincerae devotionis”, siendo su
primer Inquisidor General el Cardenal Torquemada.
La Santa Inquisición fue la única
institución que se implanto y que tenía poder y potestad de actuación en todos
los territorios del reino, pudiendo actuar más allá de las fronteras de
Castilla y Aragón, pues incluso llegó a implantarse en el Nuevo Mundo. La
Inquisición la podríamos definir como un cuerpo policial interestatal, cuyo
objetivo era el de ir contra todos aquellos que estaban en contra de la fe
católica, como por ejemplo; musulmanes y judíos, y aquellos que realizaban falsa confesión
como son aquellos que tras la conquista del Reino Nazarí para no ser expulsados
decidieron hacerse cristianos, pero interiormente en sus hogares seguían
realizando las prácticas de sus religiones lo que se denominaron como falsos
conversos o herejes.
Además del tribunal perseguir a
todas aquellas personas que estaban
cometiendo herejías y eran enemigos de la fe de Cristo, muchos de aquellos
condenados eran denunciados por medio de sus vecinos, los cuales acudían ante
el tribunal para denunciar/delatar a sus vecinos de ciertas prácticas
contrarias a las que establecía la Inquisición, muchas veces el tribunal de la
Inquisición fue utilizado como herramienta por la población para ir y cargar
contra sus enemigos vecinos por envidias y rivalidades entre ellos.
Pero
referente a la villa de Chillón más en particular, nos centraremos en detallar
aquellas personas que fueron condenadas por el tribunal de la Inquisición, así
como conocer la figura de Isabel Sánchez, la llamada Inquisidora, dicha vecina en la villa fue la delatora de todos
aquellos herejes, falsos conversos y judaizantes ante el tribunal de la
Inquisición de Córdoba hacia el siglo XV-XVI. Así como todas las prácticas que
se podrían considerar de brujería eran penadas con fuertes condenas e incluso
con la muerte. Isabel fue muy apreciada por el tribunal eclesiástico y por la
Inquisición de Córdoba, donde se le ha reconocido grandes méritos por llevar a
cabo la buena práctica de la ortodoxia cristiana. Su casa se encuentra
actualmente ubicada en la plaza de la villa próxima a la iglesia parroquial de
San Juan Bautista y Santo Domingo de Silos, en la cual se conservan restos de
su pasado en su interior como son: Un azulejo representando la figura de San
Roque (Patrón de Chillón) y un escudo de mármol en la que aparece ella misma
representada portando un rosario (mano izquierda), una cruz (mano derecha), un
león a sus pies y un castillo de fondo junto con unos cipreses. Dicho escudo se encuentra
enmarcado dentro de un rótulo con la siguiente inscripción: “[Mihi autem]Absit gloriari, nisi in cruce domini nostri
Jesu Christi”, cuya traducción es “ No deseo para mí más gloria, que la de Nuestro Señor Jesucristo en la Cruz”[1].
A
continuación paso a detallar algunos de los vecinos condenados en la villa de
Chillón por el tribunal de la Inquisición por ciertas prácticas y que les
llevaron a cumplir una condena, como puede ser llevar un “sambenito”, pero otra
mucho peor era estar condenado a muerte o ser interrogado por medio de tortura
para confesar sus pecados. Dichos vecinos que destaco pudieron ser delatados
por Isabel Sánchez, la Inquisidora, ya que los años en los que fueron
realizados los procesos de fe como podemos ver son:
·
Proceso de fe de Andrés Sánchez: Proceso de
fe de Andrés Sánchez, vecino de Herrera y después de Chillón, hijo del tejedor
de paños Juan de Belalcázar y de Olalla Muñoz, por judaizante. (fecha
1500/1509)[2].
·
Proceso de fe de Gabriel Peñuela, residente
en Olias del Rey (Toledo) y natural de Chillón (C. Real), hijo de Antón Peñuela
y de Macaria de Mateos, por sacrilegio al poner formas sin consagrar en el
copón del sagrario. (fecha 1698)[3].
·
Proceso de fe de Isabel Alfonso, mujer de
Gonzalo Díaz, vecina de Chillón, por judaizante. (fecha 1502/1503)[4].
·
Proceso de fe de María Flores, mujer de
Fernando Sánchez, carnicero, vecino de Chillón (C. Real), por judaizante.
(fecha 1502)[5].
·
Proceso de fe de Pedro Fernández., tejedor,
vecino de Chillón (C. Real), por judaizante. (fecha1500/1501)[6].
También
nos encontraremos otros procesos inquisitoriales hacia vecinos de Chillón a lo
largo de la historia, como por ejemplo uno de los casos que me llama la
atención es el auto llevado contra María la Moya, donde se presenta alegaciones
contra ella en un proceso de fe, apodada María “la vaquera”, originaria
de Chillón, seguido en el Tribunal de la Inquisición de Córdoba, por hechicería
y curandera supersticiosa en 1748[7].
En dicho auto de fe podemos ver el interrogatorio que se le realiza a varios
testigos, donde confirman, relatan y describen algunas prácticas de curación
que la Inquisición consideraban como un verdadero motivo para tacharla de
brujería y ser condenada.
A
modo de conclusión podemos decir que las sociedades pasadas vivieron un fuerte
impacto, duras represiones y persecuciones por mediación del tribunal de la
Inquisición, lo cual marcó claramente a un pueblo durante siglos, donde dicha
mentalidad y sentimiento de pecado, impureza, herejía, brujería, etc…enraizaron
de gran forma en nuestra sociedad llegando incluso a perdurar ciertas formas de
pensar y de vivir en sociedad, donde se ha enquistado de tal forma que nos es
complicado de expulsar. Aun podemos decir que pese a vivir en pleno siglo XXI
vivimos en una sociedad en la que se está más pendiente de criticar, hablar y
denunciar a los vecinos haciendo nuestros propios juicios de valores igual que
aquellos duros y crueles tribunales inquisitoriales.
[1] Gómez
Vozmediano, M.F.: Chillón en los tiempos
Modernos, siglo XV-XVIII. Ed: Librosmundi, 2017, pp.388.
[7] AHN/1.1.11.6.1.2//INQUISICIÓN,3723,
Exp.3.
Interesante articulo sobre esta persona la cual en un primer momento pensé formaba parte del tribunal algo que me sería mas extraño que como nos cuentas solo el papel de delatora.
ResponderEliminarEn la ultima frase nos dices que aun somo como en aquellos tiempos y que razón tienes.
Saludos.
Muchas gracias!!!Me alegra que te haya gustado esta historia, sobre esta persona tan particular en la villa de Chillón. Muchas gracias. Un saludo
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